Gunther Barajas*
La transformación que se está produciendo en el sector energético obliga a cambiar la manera en que el mundo gestiona y produce la energía; obliga a afrontar los cambios de mercado como no se han conocido en la historia.
Parte fundamental de esa transformación implica a las nuevas tecnologías para agilizar la innovación, mejorar sus infraestructuras y la eficacia de sus organizaciones y la capacidad de respuesta, adaptando el suministro de productos a las prioridades y las exigencias de los consumidores y la sociedad en continuo cambio.
Durante 30 años, Dassault Systèmes ha contribuido a optimizar los recursos y los procesos de suministro del sector energético a nivel mundial, permitiendo ejecutar las operaciones de forma eficiente, reducir la huella en el medioambiente y mejorar el rendimiento de los activos.
Ahora, en la cuarta etapa de su historia, con la EXPERIENCIA 3D, expande universos virtuales más allá de Product Lifecycle Management, ayudando a los clientes a crear experiencias fascinantes para sus consumidores y el desarrollo de productos y activos, desde el diseño hasta el reciclaje.
El Centro de Tecnología para Aguas Profundas (CTAP), del Instituto Mexicano del Petróleo (IMP), en el municipio de Boca del Río, Veracruz, es muestra del crecimiento y expansión de este centro público de investigación hacia temas del corto y mediano plazos en la industria de los hidrocarburos de nuestro país.
Este centro innovador posicionará al IMP dentro del sector energético, le permitirá reforzar su competitividad en el mercado, incrementar sus capacidades en investigación, desarrollar tecnología de vanguardia y la formación de recursos humanos calificados que requiere la industria nacional para la producción de aceite y gas en campos localizados en aguas profundas y ultra-profundas del Golfo de México, tanto para el sector público como el privado.
El uso de soluciones de simulación realistas le permitirán reducir significativamente el tiempo requerido para construir un modelo geo mecánico y reducir los tiempos de cálculo, lo que permite mediciones precisas y una mayor productividad.
Y, sobre todo, a buscar los escenarios que ayuden a elevar la capacidad de inversión con mayor eficiencia. La industria energética en México es un factor clave para el crecimiento del país y por lo tanto es de gran relevancia que se involucre enla nueva transformación digital y el uso de nuevas tecnologías. Los métodos, procesos, organizaciones e incluso las estrategias se están transformando y afrontan retos que se deben superar para asegurar un crecimiento y éxito a largo plazo.
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