A los mexicanos la quincena les dura sólo 13 días. De acuerdo con el estudio Índice de Fin de Quincena realizado por De la Riva Group, la quincena de los mexicanos tiene un periodo de vida de 13.62 días.
Una mala administración financiera, de la mano de factores económicos, tiene como consecuencia que más de un mexicano sufra para solventar sus gastos antes de su día de pago. De acuerdo con datos de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, más de 48 millones de adultos (63.4%) en México no llevan un registro de sus gastos y más de 17 millones (24%) no ahorran regularmente.
En lugar de sólo contar los días para que llegue la siguiente quincena, existen medidas que puedes tomar para tener unas finanzas más saludables y evitarte el estrés de quedarte sin dinero.
La startup de préstamos en línea Yapp se dio a la tarea de advertir sobre algunos de los peligros financieros a los que nos enfrentamos y que nos impiden llegar sanos y salvos a la siguiente quincena.
1. No saber distinguir entre gustos y necesidades
En muchas ocasiones nuestras prioridades están distorsionadas y perdemos la noción de lo que realmente es necesario, optamos por realizar compras innecesarias en lugar de apartar previamente el dinero que necesitamos. Al inicio de la quincena, nos sentimos confiados porque acaban de pagarnos y realizamos todo tipo de gastos superfluos como salir a comer o visitar centros comerciales para ver qué se nos antoja.
Una alternativa más sensata es separar en sobres los gastos inevitables, como la renta o el dinero que invertimos en transporte o gasolina para llegar al trabajo; destinar una parte a gastos de entretenimiento y procurar no gastar más de lo presupuestado.
2. Los gastos hormiga
¿Vas a pedir un Uber cuando podrías llegar caminando en 20 minutos? Papitas, cigarros, cafés de 40 pesos… son gastos imperceptibles pero que si sumas al final de la quincena consumen gran parte de tu sueldo.
Esas compras insignificantes y aparentemente inofensivas se comen alrededor del 12% del salario de los mexicanos mensualmente, de acuerdo con un estudio realizado por la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef).
3. La renta, los servicios y las deudas
Resuelve tus deudas primero. Antes de enloquecer y gastar 300 pesos en una comida, analiza cuáles son tus gastos de la quincena. Quizás llegó la inevitable fecha en la que tienes que pagar la renta o el Internet, o simplemente ya te toca liquidar ese préstamo que solicitaste la última vez que tu quincena no rindió.
Una excelente forma de identificar los gastos que realmente no son necesarios es realizando un presupuesto. Simplemente tienes que hacer una lista de tus prioridades y de los artículos en los que gastas regularmente, pero que no son indispensables, asignarle una cantidad a cada una de ellos y ver de cuánto dinero dispones a la quincena. Al final podrás observar cuánto estás gastando de más y decidir de qué puedes prescindir.
4. No sabes utilizar correctamente tu tarjeta de crédito
¿Utilizaste tu tarjeta para pagarle a ese amigo que te salvó de morir de hambre el mes pasado y ahora le debes dinero al banco? Puede ser que tu problema sea que vives en un círculo vicioso de deudas, entras en un apuro de dinero para salvarte de otro y siempre estás gastando más de lo que en realidad ganas.
Cuando utilices tu tarjeta de crédito, procura que sea en artículos que sabes que necesitas, pero que quizás no puedes pagar de manera inmediata, y usa los meses sin intereses a tu favor, sin dejar de lado que con lo que ganas puedes ir cubriendo tu deuda y no generar otras.
5. Una cartera rebosante de efectivo es tu peor enemigo
Sales a tomar con tus amigos y te llevas 500 o hasta mil pesos en la cartera “por si no hay terminal”: Tremendo error. Cargar todo el tiempo con efectivo es uno de los peligros financieros más comunes, pues vivirás con la tentación de gastarlo, además de que siempre existe el riesgo de perderlo o sufrir un asalto.
No cargues con efectivo todo el tiempo, intenta salir con un plan en mente de cuánto puedes gastar realmente y apégate a él.
Identificar qué día pagas la renta, qué día pagas la suscripción a Spotify, cuándo te toca pagar los servicios básicos, cuánto puedes destinar a transporte o gasolina son básicos que todos debemos tener en mente.
La mejor forma de llegar sano y salvo a la siguiente quincena es siendo organizado y teniendo perfectamente bien identificado cuánto y cuándo gastarás, y en qué.