El actual modelo económico lineal –producir, usar y tirar– está llegando a su fin; y es que frente a un contexto en donde los recursos son cada vez más escasos, el planeta ya no puede sostener este ritmo de consumo que tiende a la alza en un mundo tan competitivo.
Hoy en día, las personas están acostumbradas a pasar gran parte de su tiempo en el lugar de trabajo, sin embargo la gran mayoría no se percata de la cantidad de desechos derivados de las actividades productivas. De acuerdo con cifras de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT), en el periodo comprendido entre 2003 y 2018 la generación de residuos sólidos urbanos se incrementó en más del 61%, superando las 53 millones de toneladas de desechos al año.
Expertos de todo el mundo coinciden en que la economía circular –reducir, reusar, reciclar y reaprovechar– es la mejor vía para ayudar a preservar los recursos del planeta. Este innovador esquema pretende transformar el sistema productivo, al optimizar el uso de los recursos para así generar el mínimo impacto al medio ambiente.
Para lograr este objetivo, es fundamental la participación activa de las organizaciones públicas y privadas; se estima que si los más de 5 millones de centros de trabajo que existen en el país modificaran sus hábitos de consumo, la reducción del impacto al ecosistema sería formidable. Es por ello que Veolia –compañía global líder en la gestión eficiente y responsable de agua, residuos y energía con soluciones para municipios e industrias– nos comparte algunas recomendaciones para crear un entorno laboral más amigable con el medio ambiente y reducir nuestra huella ambiental.
1. En la medida de lo posible, al finalizar el día desconecta los aparatos de la corriente. ¿Sabías que algunos equipos consumen energía aun cuando están apagados? Desconectarlos te permitirá disminuir el consumo eléctrico y su consecuente impacto en el medio ambiente.
2. Olvídate del papel, aprovecha las ventajas de los medios electrónicos. El desperdicio de hojas de papel en una oficina puede ser enorme. Si queremos cuidar nuestro planeta, hay que evitar su uso; cuando sea estrictamente necesario, imprime los documentos por ambos lados o reutiliza las hojas.
3. Reutiliza artículos como carpetas y separadores, e investiga organizaciones que se encarguen de su correcto reciclaje una vez terminada su vida útil. Intenta aprovechar al máximo los artículos de oficina, una vez finalizada si vida útil existen diversas compañías que se dedican a reaprovecharlos. Según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), a nivel país existen 241 centros de acopio. Busca el sitio más cercano a tu ubicación en el sitio http://www.ecolana.com.mx
4. Promueve el hábito de separar los desechos. En México aún no se ha logrado consolidar una cultura de la separación de residuos; ¿por qué no empezar por el lugar de trabajo?, puedes impulsar una iniciativa en tu empresa para reciclar aquellos desechos que lo permitan. Por ejemplo en todas las oficinas de Veolia existen botes que se adaptan al mobiliario, para la basura inorgánica reciclable y no reciclable.
5. Deshazte de los desechables. Invita a tus compañeros a llevar su propio tupper, termo, taza y/o vaso, con el objetivo de reducir el desperdicio que generan los envases desechables.
Es importante recordar que todos podemos contribuir para transformar el planeta a través de la economía circular y de las pequeñas acciones en nuestro lugar de trabajo.