Las bicicletas eléctricas o e-bikes son los vehículos eléctricos con mejor compra en el planeta, y esto porque, a raíz de los altos precios en combustibles, muchos cosmopolitas están contemplando la oportunidad de cambiar su medio de transporte tradicional y de paso, mejorar su salud y su condición física.
Según un estudio de Navigant Research, en 2016 se vendieron 35 millones de este tipo de bicicletas, las cuales las convierte en un producto que ha ganado popularidad en pocos años. Las mismas estadísticas apuntan a que la industria tendrá un valor aproximado de $24.4 billones de dólares a nivel global por el año 2025. Aunque China y países de La Europa Occidental tienen en la actualidad los índices más altos de compra, la Región de América Latina está abriendo el panorama para incluir en sus favoritos esta innovadora y ecológica forma de transportarse.
Aunque el comienzo de este medio fue recibido con poca emoción gracias a sus grandes tamaños, en la actualidad la industria ha trasformado notablemente su apariencia física, dando como resultado modelos más ligeros, equipados con baterías de tipo ion de litio, que gracias a su composición han hecho de la bicicleta un cambio en cuanto al rendimiento y a la estética.
Muchas ciudades se están volviendo cada vez más amigables con los ciclistas, los cuales tienen carriles propios en avenidas importantes o incluso vías enteras en medio de camellones. La bicicleta es una perfecta dupla que junta ejercicio y transportación. La modalidad eléctrica es la indicada para distancias en las cuales se haría muy complicado pedalear tanto.
Hablando del tema económico, estos modelos eléctricos no difieren tanto del precio de una bicicleta clásica, y considerando que sus funciones son parecidas a las de una motocicleta, hay una gran diferencia en la cantidad inicial, sin considerar la constante carga de gasolina que la segunda implicaría.
En cuanto a su impacto ambiental, un estudio realizado por la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid, asegura que un e-bike tiene una huella de carbono 16 veces inferior a la de un automóvil tradicional, y 6 veces menor que una motocicleta de 4 cilindros.
Linio te invita a explorar las comparaciones que han sufrido por su parecido a las motocicletas, y su desentono con las bicicletas tradicionales, las e-bikes están ganando poco a poco terreno como la mejor opción para hacer recorridos en ciudades concurridas y en distancias moderadas, como lo sería del trabajo a la casa, o de la escuela al gimnasio.
Fuentes: Movilidad Eléctrica, Navigant Research, Linio, Ciclosfera.