• Sólo el 16% de los tarjetahabientes sabe cómo se calculan los intereses en sus estados de cuenta.
• Entre 2017 y 2018 han sido emitidas 24.9 millones de tarjetas de crédito en México

Para muchos mexicanos, las deudas son una carga que crece sin que se den cuenta y además perturba su tranquilidad y bienestar. Expertos psicólogos y economistas conductuales aseguran que existen dos razones fundamentales por las cuales los mexicanos prefieren pagar con tarjetas de crédito en lugar de utilizar efectivo y esto provoca que gasten mucho más de lo que realmente necesitan, o tienen.
La primera razón de gastar más con una tarjeta de crédito, es que el acto de sacar del bolsillo el dinero en efectivo y dárselo a alguien más, provoca una sensación de “pérdida”, es decir, sienten que el dinero “se va de las manos” y no regresará. La segunda razón se refiere a la sensación que provoca este acto, ya que para la mayoría de las personas es más sencillo firmar un pagaré, situación en donde se mueve el dinero de forma abstracta, y no están sufriendo la pérdida del dinero.
El Banco de México informó que en 2017 y lo que va del 2018 fueron emitidas un total de 24.9 millones de tarjetas de crédito para personas físicas, de las cuales se estima que sólo un 16 por ciento de los tarjetahabientes sabe cómo se calculan los intereses en sus estados de cuenta.
Por ello, Credifiel te da unos consejos para tomar ventaja de las tarjetas de crédito y saber cómo utilizarlas, sin que esto signifique perder la satisfacción de comprar lo que se necesita:
Conoce tu fecha de corte para ampliar el plazo de pago: esto permitirá planear compras en los primeros días para tener el tiempo suficiente para pagar, ya que por lo regular las tarjetas de crédito fijan la fecha de pago entre 20 y 30 días a partir de la fecha de corte.
Pide meses sin intereses: hay posibilidades de que solicites directamente al banco de tu tarjeta de crédito que algunas compras especiales que realizaste te otorguen plazos sin intereses, pero lo más importante es no atrasarte y realizar los pagos correspondientes, ya que si alguna mensualidad se vence, es allí donde se comienza a generar el interés.
Conocer la tasa de interés de tu tarjeta: esto resulta indispensable para que puedas decidir con qué plástico deberás realizar tus gastos. Un consejo práctico sería seleccionar las tarjetas con interés alto y hacer con ellas compras de cantidades pequeñas y que sabes que tendrás el dinero para pagarlos en la fecha límite de forma total y seleccionar las tarjetas con interés más bajo para hacer gastos elevados los cuales sabes que vas a tardar más tiempo en pagar.
Evitar los cargos por cobranza: si no estás al pendiente de la fecha límite de pago y se pasa la realización del mismo, la deuda se incrementa por “gastos por cobranza”, monto que se sumará al total de la deuda, de tal manera que si sólo se paga el mínimo requerido, los gastos por cobranza se sumarán a todo lo que se debe y al siguiente mes, se verán reflejados los interés y el IVA.
Pagar el total del “saldo para no generar intereses”: uno de los principales errores que se cometen y que hacen que las deudas crezcan como espuma sin control es pagar el “saldo mínimo”, por eso se recomienda pagar el adeudo mensual o por lo menos el doble del monto mínimo.
Solicitar un préstamo: aunque en apariencia podría pensarse que es contradictorio, no lo es. Salir de deudas se puede lograr adquiriendo un préstamo personal rápido. Los préstamos rápidos sin consulta de Buró de Crédito son una herramienta muy útil para detener el aumento de intereses de las tarjetas de crédito y se convierten en una gran alternativa para disminuir de forma rápida y más óptima el monto de los pagos mensuales que requieren las tarjetas de crédito.
Es por esto que Credifiel recomienda utilizar las tarjetas de crédito como una excelente opción para equilibrar los gastos, por ello, es necesario contar con la información suficiente sobre cómo utilizar estos plásticos que a la larga ayudarán a tener un buen historial crediticio y te permitirán disfrutar de muchos beneficios.